Por: Lilibet Enriquez y Héctor Bernardo

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) propuso hacer “una pausa” en la relación de México con España, al considerar que varias empresas de ese país han actuado de manera abusiva y ventajosa, amparadas por el poder político. Aclaró que se trata de un planteamiento público, no de una declaración diplomática formal.

“Vamos a darnos tiempo para respetarnos y que no nos vean como tierra de conquista. O sea,  queremos buenas relaciones con todos los gobiernos, con todos los pueblos del mundo, pero no queremos que nos roben. Así como los españoles no quieren que lleguen de ningún país, y hacen bien, a robarles, pues tampoco queremos nosotros”, explicó el mandatario.

López Obrador enfatizó que su comentario no es respecto del pueblo español, sino del actuar de varios empresarios, “a los de arriba, en la cúpula del poder económico y político, que es la misma cosa”.

En una conferencia de prensa habitual, AMLO comentó que varias empresas españolas, como Iberdrola, Repsol y OHL, se han comportado como colonialistas y no comprenden que esa etapa ya se terminó. Basado en esos datos solicitó el período de pausa en las relaciones.

El mandatario mexicano hizo referencia a una visita del presidente de la empresa Iberdrola a la nación latinoamericana y su insistencia en mantener las relaciones en los mismos términos, de saqueo, que con los gobiernos de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.

Explicó que los privilegios de los que gozaban garantizaron el carácter monopolista de estas empresas españolas, que además recibieron subsidios multimillonarios, que debían destinarse a combatir la pobreza en México: “¿Cuánto se llevó Repsol de México en el gobierno de Calderón solamente en subsidios ilegítimos, y los de OHL que fue la empresa favorita del sexenio pasado, también española?”, cuestionó el presidente.

“A veces tarda que se entienda que ya son otras condiciones. Como llevó bastante tiempo el saqueo, todo lo que fue el periodo neoliberal, 36 años, no alcanzan a internalizar de que esto ya es distinto, entonces hay que estarles avisando. Esto nos pasa con frecuencia, tenemos que estarles diciendo, ya no es el tiempo en que venían y no hacían ningún trámite (…) se les ponían los funcionarios públicos de tapete. Ya no es así, ya no se acepta la corrupción”, afirmó.

AMLO explicó que su propuesta de pausar las relaciones tiene que ver con esos datos y que va a ser conveniente para los pueblos de ambas naciones,  “porque era un contubernio arriba, una promiscuidad económica política, en la cúpula de los gobiernos de México y España, por como tres sexenios seguidos, y México llevaba la peor parte, nos saqueaban”.

La intención es serenar los vínculos, comentó el mandatario, pues el período del clientelismo terminó y es preciso que las empresas españolas lo reconozcan, reciban el descontento por los abusos cometidos contra los mexicanos, e incluso pidan disculpas.

Las declaraciones  del presidente mexicano con respecto a España tienen antecedentes. En 2019, AMLO pidió formalmente al gobierno y al Estado españoles, mediante una carta, que pidieran perdón a los pueblos originarios de México por los abusos cometidos durante la época de la conquista, en el siglo XVI.